El Ayuntamiento de Aguaviva aprobó por unanimidad en sesión plenaria ordinaria celebrada ayer martes solicitar a la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón la declaración del Puente de Cananillas como Bien de Interés Cultural (BIC), fundamentando dicha petición en los valores arquitectónicos, históricos e, incluso, sociales con los que cuenta esta icónica infraestructura, que salva el río Bergantes comunicando las términos municipales de La Ginebrosa y Aguaviva.

Asimismo, el Pleno autorizó la cesión gratuita de sendas parcelas al Instituto Aragonés del Agua en las que se ubicará la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de la localidad, cuya construcción está prevista que se inicie próximamente, dado que las obras ya han sido adjudicadas por el IAA a la UTE formada por las empresas IDESER y CICLAGUA por un importe de 811.337,59€ (IVA no incluido).

Por otro lado, en la sesión se ratificaron los días inhábiles de carácter local para el año 2023, que en este caso serán el viernes día 18 de agosto (Fiestas Mayores) y el lunes 28 de agosto (Alfombras del Santísimo Misterio), y se aprobó inicialmente la nueva ordenanza fiscal reguladora de la tasa por alquiler de mobiliario municipal, de manera que pueda quedar regularizada la cesión para su utilización privada o aprovechamiento particular de los diversos elementos de titularidad pública como mesas, sillas, etc.

En materia económica, se dio luz verde a la Cuenta General del 2021 y se aprobó la tercera modificación presupuestaria del actual ejercicio, la cual moviliza fondos por un total de 114.631,99€ incorporando diversas ayudas recibidas en los últimos meses por el Ayuntamiento para la ejecución de obras, prestación de servicios o adquisición de fondos bibliográficos.

Por último, el Pleno acordó iniciar el procedimiento para la modificación de la denominación de varias vías públicas de la localidad. Así pues, se plantea el cambio de nombre de la calle Uno por calle de la Concordia (carrera de la Concordia), reconociendo este episodio histórico acaecido en el s. XVII por el cual Aguaviva pasó a ser una villa independiente tras separarse de La Ginebrosa; la sustitución de la calle Dos por calle de Vecindell (carrera de Vecindell), dado que éste fue el primer asentamiento poblacional en el municipio que se ha podido documentar; y la recuperación de la calle de la Dula (carreró de la Dula), nombre tradicional de esta vía ubicada entre la calle Arrabal y la calle Horno dado que era precisamente en este lugar donde se agrupaban los pequeños rebaños de ganado de diferentes vecinos para posteriormente llevarlos a pastar de manera conjunta a un terreno comunal, lo que es conocido como la Dula.