Con el objetivo de impulsar el desarrollo turístico a través del deporte, así como también de poder desestacionalizar las visitas a la localidad hacia épocas que suelen contar con menor afluencia, el Ayuntamiento de Aguaviva ha acondicionado y señalizado sendos recorridos senderistas a lo largo del término municipal, dando a conocer de esta forma su entorno natural y los rincones más singulares. Ambos recorridos han sido homologados como Senderos Turísticos de Aragón, recibiendo las nomenclaturas de PR-TE 95: Cerro de las Calderas y PR-TE 129: Vuelta por la Tornera y Cananillas.

Así pues, el PR-TE 95 es un recorrido circular de 12,1 km por la parte oeste del término municipal, para el cual se calcula una duración de unas 4 horas, y que discurre parcialmente dentro de un Espacio Natural Protegido (ZEPA Río Guadalope – Maestrazgo), cuya ruta se inicia en el entorno de la ermita de Santa Bárbara, desde donde se va alejando de la población alternando tramos breves por senderos bien definidos y caminos agrícolas, cruzándose con el sendero GR-8 para sin gran dificultad llegar hasta el entorno del Molino Harinero de Aguaviva.

Posteriormente, un camino agrícola conduce el itinerario bordeando la vega del río Guadalope y la acequia Mayor hasta la Masía del Juaco, donde se retoma el GR-8. El recorrido abandona entonces el valle del Guadalope adentrándose por un camino que poco a poco se encaja en el fondo del barranco, dejando atrás la Fuente del Lobo. A continuación, la ruta abandona el camino principal y el GR-8, para iniciar el ascenso al cerro de las Calderas por un sendero con tramos de firme pedregoso. Poco después de alcanzar la parte alta del cerro, el recorrido pasa junto a una pequeña cueva señalizada, continuando un tramo por la cresta.

Tras ello, el sendero discurre hacia el cerro del Buitre, desde donde se inicia el descenso, cruzando el barranco del Herrero, para continuar la bajada hacia la balsa del Cherell, alcanzando un camino que, entre campos de olivos y sin apenas dificultad, pasa junto a la fuente de la Fontanella, encarando ya la llegada a Aguaviva.

En el caso del PR-TE 129, se trata de un recorrido también circular pero más exigente, de 17,5km y unas 5 horas y media de duración, por los paisajes forestales más agrestes y desconocidos de la localidad, que parte también de la zona de la ermita de Santa Bárbara, pero en este caso se dirige inicialmente por zona urbana hasta la rotonda de la Plaza Manuel Valencia, frente al Pabellón Municipal, y encara la primera parte de la ruta saliendo de la población acompañado por las marcas del Camino de Santiago, durante 4,5 km en sentido inverso, hacia la balsa Nueva.

Desde allí se inicia un sendero bien definido que lentamente asciende adentrándose en paisaje forestal, y al llegar a los pies del cerro de la Tornera, punto más alto del término municipal, se abandona ya la traza del Camino de Santiago, continuando por un sendero paralelo al barranco de la Espadeta. Tras superar un pequeño collado, el recorrido desciende al barranco de Empina, el cual se remonta por una bonita senda a la sombra de la espectacular vegetación. El sendero continúa hasta la cabecera del barranco de la Cubeta, donde inicia un lento descenso de regreso.

Al final del sendero, el bosque se funde con antiguas terrazas de cultivo abandonadas, donde un breve camino conduce el camino hasta la carretera A-225. Tras el cruce de esta vía, el itinerario continúa descendiendo hasta el espectacular paraje de Cananillas en el río Bergantes, con sus espectaculares formaciones geológicas. Desde allí, la ruta sigue hacia el puente del mismo nombre, a partir de donde se funde con el sendero GR-8 hasta alcanzar de nuevo Aguaviva.

Toda la información sobre ambos senderos está disponible en la web municipal (www.aguaviva.es), así como en el portal especializado Wikiloc. Además, cabe reseñar que se ha editado un vídeo promocional para dar a conocer este proyecto, el cual se puede visionar en el canal de YouTube y en los perfiles de las diferentes redes sociales del Ayuntamiento de Aguaviva.